Aunque no puede hablarse de un plan petrolero, el cual tendría que ser bastante más completo, el candidato de la democracia, Henrique Capriles Radonski, adelantó algunas ideas sobre lo que será su política petrolera. Dijo lo siguiente:
1) Donación de petróleo a países se realizará siempre y cuando en Venezuela no exista pobreza extrema. “A partir del 10 de enero de 2013 no saldrá ni una sola gota de petróleo gratis de Venezuela a otro país, mientras haya un solo venezolano en la pobreza extrema”.
Mi comentario. Esta es una afirmación que apunta en la dirección correcta pero se queda corta. Venezuela no debe, nunca jamás, regalar petróleo a ningun país. Ello es totalmente irracional. El petróleo es un recurso no renovable, por lo tanto invalorable. Un país puede regular cambures o caraotas negras, productos que se siembran y se cosechan año trás año pero no un producto que una vez consumido no puede reemplazarse. Lo venezolanos debemos tomar conciencia, de una vez por todas, que el petróleo no está para andar regalándolo y hacienda politiquería con el. Capriles tiene razón cuando critica el entreguismo estúpido y criminal de Hugo Chávez, al regalar/subsidiar unos 300.000 barriles diarios de petróleo a Cuba, el Caribe, Bolivia, Nicaragua y Ecuador, pero deja una rendija abierta para futuros regalos, “cuando no tengamos pobreza extrema en Venezuela”. En realidad, la eliminación de lapobreza extrema tomará muchos años , si es que hacemos bien las cosas en el país.
Y no solo debemos suspender los regalos de petróleo, como los hechos a la satrapía cubana, sino también los intercambios de petróleo por cambures o caraotas negras.
2) Se encargará del abastecimiento hospitalario a nivel nacional. “Primero hay que construir hospitales aquí. El día que no falte ni una gasa en un hospital podemos hablar de regalar petróleo”, aseguró Capriles Radonski.
Mi comentario. De nuevo, el regalo de petróleo no puede depender de la eliminación de la pobreza extrema ni del suministro de gasa a los hospitales. El país requiere una política petrolera en la cual se establezca que el petróleo no se regala y punto.
3) Ganancias de las ventas petroleras serán destinadas al bienestar social de los venezolanos. “Queremos garantizar con los recursos petroleros que ninguna familia se acueste sin comer, que ninguna madre sufra por falta de protección a su familia, que ningún joven abandone el liceo, que ningún adulto mayor sea dejado a su suerte y a la de su familia, y que ningún niño deje de asistir a la educación preescolar”.
Mi comentario. Este ha sido el objetivo explícito o implícito de los mandatarios venezolanos por casi un siglo: transformar la producción petrolera en bienestar social. Pero ello no se hace simplemenete con buenos deseos o, peor aun, convirtiendo a PDVSA en un centro de importación de comida podrida, como lo ha hecho Hugo Chávez. Se hace estableciendo un modelo eficiente de industria petrolera, el cual nos de el óptimo beneficio financiero al mínimo riesgo. Ese ingreso deberá entonces utilizarse con transparencia en programas estructurales de educación, salud, infraestructura y seguridad ciudadana. Lo subsidios directos deben sr un componente secundario de ese esfuerzo, no el componente primario, como lo hace este régimen. La limosna no puede crear un país de ciudadanos sino un país de limosneros.
4) Duplicación de la producción petrolera nacional a 6 millones de barriles diarios. “Hoy vengo a comprometerme con todos los venezolanos a activar la producción petrolera para crear empleos con calidad que permitan que cada uno de ustedes mejore su calidad de vida y la de su familia, y eso lo lograremos trabajando en equipo entre sector público y privado, en un entorno de confianza, estabilidad y transparencia”.
Mi comentario. Ese aumento de la producción es no solo posible sino deseable. No es possible olvidar que el planeta marcha, lentamente pero marcha, hacia el desarrollo de fuentes alternas de energía. Venezuela está sentada frente a inmensos recursos de petróleo pesado, muy costoso de mejorar y su relación recurso a producción es totalmente asimétrica. Capriles lo dice muy bien, al recalcar que con un 20 por ciento de los recursos mundiales de hidrocarburos Venezuela apenas aporta el 3,5 por ciento de la producción. A la tasa actual de producción el petróleo de la Faja del Orinoco tardaría unos 250 años en producirse. El planeta estará utilizando significativamente otras fuentes de energía dento de los próximos 60 años. Camarón que se duerme se lo lleva la corriente.
Por cierto, llevar la producción petrolera a seis millones de barriles diarios tiene una consecuencia importante: Venezuela tendría que salirse de la OPEP.
5) Prometió a los trabajadores de Pdvsa estabilidad laboral y a su vez, los exhortó a no temer por represalias políticas por expresar sus ideales.
Mi comentario. Comprendo que el candidato no pueda decir lo que debería decir. Que PDVSA tiene demasiada gente improductiva en la nómina. Que esa gente tendrá que ser despedida porque una empresa no es un asilo para incapacitados mentales ni una guarimba para los compañeritos del partido. Más difícil todavía sería decir que PDVSA es una empresa irrecuperable, demasiado contaminada por la corrupción y la ineptitud. El candidato piensa que será necesaria una transición de la situación actual a la situación finalmente deseada, la cual tomará algun tiempo.
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Un comentario final. Comprendo la situación del candidato. Ningun candidato en Venezuela ha dicho jamás lo que va a hacer, sino que trata de decir lo que piensa que el país desea oír. Pero esta actitud, aunque comprensible, no es, en última instancia, la más didáctica ni la que nos hará crecer como sociedad. Añoro el día en el cual un candidato venezolano pueda pararse frente al país a decirle exactamente cual es la realidad y cuales son los sacrificios y las tareas que tenemos por delante, si es que queremos progresar.
Quien será el líder, el estadista, que le diga a Venezuela la verdad? Probablemente decir la verdad, ponerle al país un espejo por delante para que se vea en su realidad, le costaría al líder su futuro politico. Pero, valdr la pena tener un futuro politico a base del engaño? Por supuesto, Chávez diría, entusiasmado, que sí. Sin embargo, ya hemos visto el precio que Venezuela ha tenido que pagar por tener a un sátrapa, mentiroso y acomplejado, en el poder. El país está en el suelo. Recoger este país del suelo necesitará un proceso gradual, de ir lentamente desmontando la pesadilla que ha creado el sátrapa, o será necesario un tratamiento de shock, a sabiendas de que quien lo haga tendrá que irse a su casa? CAP II trató de hacer algo de esto y tuvo que irse a su casa. Quizá ello se debió a que se olvidó de la mano izquierda necesaria para contrarrestar el impacto de sus medidas en un pueblo acostumbrado al estado paternalista, el cual – por cierto – el mismo CAP contribuyó significativamente a crear durante su primera presidencia. Como en el hogar, no se puede ser permisivo un día y estricto el otro. Ni el niño ni el país lo entienden. No es fácil trazarse un camino, pero si hay un camino debe ser el de hablarle claro al país, a riesgo de pagar el más alto precio politico. Y, quien sabe, quizá algun día el pueblo entienda.
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